
Hurté minutos eternos al tiempo
Me dediqué espacios infinitos
Fui egoísta
Descubrí mi sombra
Detuve el atardecer
Sintiéndome dueña del universo
Capturé el instante infinito
Cuando abre una flor
Congelé una ola
Para extasiarme en su espuma
Corrí a través de la colina
Respiré profundo
Hasta ahogarme en mi misma
Sentí la hierba en mis pies descalzos
Descubrí la risa
De la niña que aún vive en mí
Mis sentidos se embriagaron de naturaleza
Y me sentí libre